¿Cómo lograr que una fundación que reúne tres áreas distintas como la innovación, la salud y la cultura, dirigidas a públicos objetivos con intereses totalmente diferentes, sea percibida como una organización de vanguardia, coherente, empática y alineada con sus valores y objetivos?
En resumen, Fundación Columbus buscaba llegar a targets muy distintos con propósitos diferentes para cada uno:
Los mensajes para cada uno debían ser diferentes, pero respondiendo a un concepto e imagen global integradora.
Por su carácter benéfico, se debía lograr con los menores recursos y la máxima optimización.
DESARROLLAMOS UNA ESTRATEGIA INTEGRADORA
Desarrollamos una estrategia de branding capaz de unir aspectos tan distintos e intereses de un modo que resultase fácil de comprender, de identificar y que, sobre todo, le permitiera a la Fundación cumplir con sus diferentes objetivos con efectividad.
No contar con una buena estrategia de branding por “ahorrar” recursos, es el motivo por el que muchas organizaciones no son bien percibidas y esto retrasa la consecución de sus metas o, lo que es peor, fracasan en sus propósitos.
Por tanto, se imponía la necesidad de estudiar a fondo, reflexionar, sintetizar y crear una identidad corporativa sólida y bien alineada capaz de soportar en toda su extensión la marca de la Fundación.
DEFINIMOS UNA ESTRUCTURA PEDAGÓGICA DE COMUNICACIÓN
La Fundación tiene necesidades globales de comunicación y, a su vez, específicas derivadas de sus tres pilares: Innovación, Salud y Cultura. Esto requiere dirigir mensajes diferenciados que atiendan las exigencias de cada segmento. Para evitar confusiones entre objetivos, targets y medios, creamos una estructura sobre la que sería fácil comprender y orientar todas las acciones de la organización.
Gráficamente la representamos así:
Comunicación salud
COMUNICACIÓN GENERAL
Comunicación innovación
Comunicación cultura/colaboración
La estructura se sintetizó de un modo que el público entendió de inmediato qué era Fundación Columbus, sus objetivos y su forma de conseguirlo.
La misión de la Fundación Columbus es contribuir al desarrollo de la sociedad
mediante tres objetivos específicos:
Impulsar la innovación científica española para obtener nuevos y más efectivos tratamientos que tengan un impacto real.
Facilitar el acceso a las terapias más avanzadas y efectivas a los niños y personas más necesitadas que padecen enfermedades raras y de tipo oncológico.
Difundir la cultura y, a su vez, recaudar los fondos necesarios para cumplir con los objetivos fundacionales.
Creamos un símbolo vinculado a la marca “Columbus” que representa las carabelas avanzando por el viento. Paralelamente, cada círculo, representa a los niños beneficiados, a los científicos que crean la innovación, a los músicos que fomentan la cultura y a cada persona que contribuye con sus donaciones y esfuerzo con la Fundación, buscando que todos se sientan identificados e integrados con el proyecto en el que cada uno de ellos es clave.
Por su parte, la marca se resolvió con una tipografía en minúsculas y con predominio de curvas que le otorgan un carácter humano, cercano y también profesional. Su leve inclinación hacia adelante provoca la sensación de movimiento y avance.
Se definió un color corporativo de la gama de los azules ya que, psicológicamente, transmite confianza, en una tonalidad que también denota esperanza y juventud.
Se descartó incluir los colores naranja y gris de la empresa madre, Columbus Venture Partners, ya que este azul transmitiría con más fuerza los valores y misión de la Fundación.
Tomamos el trabajo inicial para facilitar la expansión de la Fundación a los Estados Unidos. Todos los elementos se han traducido, pero el diseño esencial está ahí y es parte de la misma marca.
1. de sanar 2. de disfrutar la cultura 3. de innovar
Debido a que la música sería el hilo conductor a través del que se difundiría los objetivos de la fundación y se recaudarían fondos, pensamos en un término musical que sintetiza todo ese espíritu y esa necesidad de llegar a tiempo para salvar a los niños afectados por cáncer y enfermedades raras.
Todas las acciones de la Fundación, incluido su tour de conciertos (“A TEMPO, Il Soldato & Friends”), estarían encabezados por la expresión: A TEMPO.
Simple, intuitivo y memorable. Aplicable a todo, desde el tour de conciertos organizado por la Fundación, hasta los congresos científicos, desde los anuncios, hasta la web… una sencilla expresión con una enorme carga de intensión que se percibe intuitivamente.
Definimos el tono de voz, el tipo de imágenes, la distribución de espacios y todo aquello que permitiría conectar con los diferentes targets.
Las imágenes de personas sería la tónica principal, tanto los protagonistas de las historias infantiles y sus familias, como los artistas y científicos.
Lo decidimos así, porque para despertar la empatía no hay nada más efectivo que apelar a las neuronas espejo del cerebro, que permiten vincularse e identificarse con los sentimientos de los demás.
Ejemplo de la coherencia estética que facilitó la identidad de marca durante el primer concierto.
Programa de mano y escenario con los artistas que protagonizaron la velada.
Una estrategia de branding consistente, no solo logra una comunicación e imagen de marca potente, también supone un importante ahorro en el esfuerzo de las organizaciones para alcanzar sus objetivos con mayor efectividad.
Mantener una conexión empática con el cliente y actuar de un modo oportuno en el proceso de desarrollo se refleja en la solidez de la marca.