Growth Hacking Marketing: el Arte de crecer Rápido
Nos encontrábamos metidos de lleno en el tema del Neuromarketing con un par de artículos, cuando una usuaria nos asaltó con una cuestión: ¿Tenéis por casualidad en mente explicar en algún post qué es eso del “Growth Hacking Marketing”? Nos encanta que nos consultéis o que compartáis con nosotros vuestras inquietudes, y más tratándose de un tema tan de actualidad y poco desarrollado en España.
Pues dicho y hecho, nos pusimos manos a la obra con el fin de desarrollar este artículo sobre esta “nueva” tendencia, que en el mundo de las startups estadounidense, y en general dentro del sector tecnológico, ya genera puestos de trabajo con el mismo nombre. Y que como muchas otras ha llegado aquí al viejo continente para quedarse.
El Growth Hacking es una nueva forma de hacer crecer una empresa (generalmente una startup) dentro de su mercado con un reducido nivel de inversión y consumo de recursos, y en un corto espacio de tiempo. Se trata de un conjunto de técnicas que emplean la creatividad, el pensamiento analítico y las métricas disponibles hoy en día, tanto de las webs como de las redes sociales, para hacer que un producto o empresa alcancen un alto nivel de exposición y posicionamiento en el menor periodo de tiempo posible.
Un claro ejemplo de Growth hacking es Dropbox, un disco duro virtual que te permite almacenar y compartir tus archivos en la nube. Su técnica más conocida y popular, que le hizo alcanzar un rápido crecimiento, es la de que un usuario de Dropbox puede conseguir espacio extra de forma gratuita al invitar a sus amigos. Se trata de una forma sencilla y efectiva para tener un crecimiento constante y exponencial.
Los growth hackers se encargan de redefinir los productos y sus técnicas de distribución para conseguir que lleguen al máximo número de personas posibles. Se han convertido en especialistas en el crecimiento de las startups mediante el análisis del producto, la redefinición de todas aquellas características que puedan generar crecimiento para, posteriormente, distribuirlo a través de determinados canales con acciones que consiguen un elevado número de leads, y todo ello con un reducido presupuesto.
Un growth hacker no se limita a la promoción de un producto, también aplica cuantas modificaciones hagan falta si considera que no es un producto competitivo.
Tener un producto que nadie quiere es uno de los peores errores que se pueden cometer en el marketing. Así que, si has realizado un estudio de mercado y posteriormente el correspondiente lanzamiento, y el producto no es bueno, hay que parar, analizar qué es lo que no funciona, mejorarlo y volver a lanzarlo. Ésta es otra de las tareas del growth hacker.
Con un nuevo ejemplo lo veréis más claro. Instagram en su origen se llamaba Burbn y era una red social más en un mercado ya dominado por los Facebook, Twitter y Google+ entre otros. De modo que no triunfó.
Sus fundadores hicieron un análisis de la misma y vieron que la función de aplicar filtros a las fotos era con diferencia lo que más se usaba (y casi lo único). ¿Cómo convertir eso en una fortaleza para que su red triunfase? Muy sencillo, redujeron su funcionalidad al mínimo, sólo se podría publicar y compartir fotos con filtros y algo de texto. La nueva red cambio de nombre y subió más de cien mil nuevos usuarios en apenas una semana. Y el resto de la historia, al igual que los de Facebook, ya la sabéis 😉
Tres son las características que podemos destacar de un growth hacker:
- Es creativo: Ya os hemos dejado claro que la creatividad es muy rentable, y a veces lo es porque en ocasiones requiere de muy poca inversión o de poco esfuerzo. Quien no arriesga no gana, así que libera tu mente si quieres ser uno de ellos.
- Es analítico: Es amante de los números, lo analiza todo hasta el más mínimo detalle, y si no tiene métricas para medir lo que necesita, las inventa. Todo tiene que estar parametrizado y medido pada poder corregirlo si falla. Cuántas menos cosas se escapen a su control mejor.
- Es curioso: esta cualidad viene un poco a raíz de la anterior. El ansia por medir le lleva a preguntarse el por qué de todo, el funcionamiento de lo que no conoce, los términos de uso de lo que tenga que usar… Si tiene que invertir horas de trabajo en empaparse de todo un manual o unas condiciones de registro, lo hará. Necesita saberlo todo.
Se trata de un perfil cuya base es similar en cierta medida al Social Media Manager, en cuanto a los conocimientos de marketing e informática, pero cuyas funciones son mucho más concretas y centradas en la operativa, el producto y la distribución, más que en la comunicación con el cliente. Se puede ver como un perfil de marketing con conocimientos técnicos o como un programador con talento creativo.
Con esto esperamos haberos dejado claro cómo es este perfil profesional y en qué consisten sus funciones, en especial a nuestra amiga Francisca 😉