9 dic'19

Del contenido a las estrellas

Desde su creación en 1973 la matriz BCG ha ayudado a multitud de empresas a tomar una decisión más o menos justificada respecto a la inversión, mantenimiento o retirada de un producto o marca.

No obstante, se trata de una herramienta muy visual, intuitiva y sencilla de utilizar, que se adapta fácilmente a otros campos, como puede ser el marketing de contenidos.

En el post de hoy vamos a revisar cómo utilizando la matriz BCG puedes optimizar el desarrollo contenidos desde dos planos diferentes.

El ROI manda

En este caso se trata de una versión cuyo foco está en el retorno de la inversión que genera el contenido. Por ello, las dimensiones de la matriz pasan a ser: en el eje de abscisas tenemos el ROI del contenido, mientras que en el de ordenadas la vida útil del contenido, esto es corto plazo o largo.

No obstante, se pueden cambiar las variables a estudiar, otras opciones son el crecimiento de los canales o la competencia del contenido. Pero como apuntamos arriba, para nosotros la eficacia es clave.

Matriz BCG de contenidos

Con esta nueva matriz obtenemos cuatro cuadrantes que nos permitirán determinar el mix que hacemos a la hora de crear contenido, buscando impactos y conversiones, tanto a largo como a corto plazo, pero siempre dando prioridad a la estrategia que más estabilidad proporcione.

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Como podemos observar, su comportamiento es muy similar al de la matriz original, por ello, la toma de decisiones respecto al contenido es prácticamente la misma.

  • Contenido vaca. Proporciona un alto retorno, pero sin embargo, la vida útil del contenido es reducida. Esto nos obliga a generar contenido muy a menudo, con el consiguiente esfuerzo que eso supone. En cualquier caso, la apuesta por este enfoque se basa en el ratio margen de beneficio/coste desarrollo contenido. Es decir, siempre que el coste se mantenga bajo, es una buena opción. Este tipo de publicaciones suelen estar relacionadas con periodos conocidos de rebajas como el Black Friday, las Rebajas, etc. o con picos puntuales que tienen que ver más bien con las tendencias del momento.
  • Contenido perro. Nos encontramos ante unas publicaciones que ni generan un alto retorno ni son “memorables” o recurrentes, por lo que quedan obsoletas muy pronto. En conclusión, a no ser que a nivel de SEO te ayuden a posicionarte para determinadas palabras clave, es recomendable no generar este tipo de contenido.
  • Contenido enigma. Dado que el retorno que genera no es elevado, a priori parece que no es una estrategia interesante, no obstante, tiene una vida útil alta, por lo que nos ayudará a posicionarnos sólidamente en torno a las palabras claves que queramos.
  • Contenido estrella. Como no podía ser de otra manera, el contenido que tiene una mayor vida útil y genera un alto retorno es el ideal.
    Hay que tener en cuenta que este tipo de contenidos suele llevar más tiempo de elaboración, por lo que el cálculo de los márgenes de beneficios vs. el coste desarrollo es crucial.

Bola extra

Como seguramente ya te has dado cuenta, el éxito de tu contenido se puede determinar de múltiples formas, por ello, es recomendable que experimentes y busques la matriz que realmente te ofrezca unos resultados útiles para la toma de decisiones.

Por eso, te dejamos aquí otras variables además de las ya mencionadas:

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